Desde los 8 años me he dedicado a ser deportista de artes marciales, específicamente de wushu. Desde mis primeras clases supe que era algo que realmente amaba hacer y era liberador al mismo tiempo. Hasta los 15 años, entrenaba solamente como un hobbie, porque era algo que me gustaba mucho y me ayudó a desarrollar muchas habilidades físicas y a aprender a superar retos físicos y mentales. En el 2022 después de pandemia, inicié como atleta de alto rendimiento en un primer nivel, comenzando así a participar en competencias estatales y nacionales con la mira hacia internacionales. Conforme más transcurre el tiempo y avanza mi nivel, me doy cuenta de lo que implica ser un atleta de alto rendimiento (aún sin estar 100% dedicada a ello)en múltiples aspectos, a veces creemos que la parte física es lo difícil pero la mental puede llegar a serlo 10 veces más. Después de pasar los nacionales 2024, llegué muy emocionada, planteándome nuevos objetivos y retos para comenzar así una preparación en mira de un evento internacional.

Cuando era niña, me gustaba ver en la tele o en YouTube videos de gimnastas, corredores, y muchos más atletas que eran de alto rendimiento y pensaba en que yo quería algo así para mi cuando fuera grande. Al momento de entrar al wushu y comenzar a ver videos sobre las competencias internacionales, soñaba con algún día llegar a hacer lo que ellos hacían.

Mi papá fue una persona que influyó mucho a que de niña quisiera dedicarme a un deporte de artes marciales ya que el también había practicado uno de joven y yo quería hacer algo como él.

Creo que algo que de alguna manera en algún punto siempre me llega a poner limitaciones, es trabajar la parte mental al momento de aprender nuevas cosas, intentar aquello que da miedo y en competencias. De algún modo con el paso del tiempo, he aprendido a gestionar mis pensamientos y a aumentar mi confianza en lo que soy capaz de hacer.

Mis 4 medallas de 1er lugar nacionales.

(Hablando en campo deportivo en general) mi mayor consejo sería no desistircuando las cosas no salen o no como queremos, no se nace siendo deportista y todo consta de un proceso en el cual tenemos que poner de nuestra parte para seguir avanzando. Siempre habrán comentarios limitantes pero cuando las metas son claras, la opinión de los demás es lo que menos importa. Siempre mantener nuestra mente presente y conciente del momento para así estar alentándote a ti mismo y disfrutar más de lo que haces.

Sí, en varias ocasiones lo he experimentado. Creo que para afrontarlo siempre sigo una serie de pasos que ido entendiendo que son necesarios para salir de ello: 1. Reconocer lo que está generando esa inseguridad

2. Concientizar de los pensamientos negativos para así afrontarlos con una afirmación positiva

3. Reflexionar sobre todas aquellas veces que he demostrado dar.

Una que otra vez me ha tocado experimentar que no se cree en la mujer tanto en su capacidad física como en un hombre pero de algún modo es un motivante para demostrar que una mujer tiene las mismas capacidades para hacer cualquier cosa que un hombre hace si se lo propone.

Me gusta mucho leer sobre superación personal y procuro consumir contenido de todo tipo sobre el tema.

De manera general: justicia, seguridad y no discriminación.

Siempre he querido escribir un libro